Ideas, ideas, ¡muchas ideas! ¿Y después?
Si llegaste a este artículo seguramente habrás tenido algún contacto previo con temas de innovación, tienes la inquietud, sabes que tienes que innovar o ya tomaste algún workshop o curso en estos temas. Si ya experimentaste el generar muchas ideas, o tienes muchas ideas de proyectos que quieres llevar a cabo y que consideras que podrían tener un impacto importante ¡Sigue leyendo!
No eres el único, nos pasa a muchos que cuando logramos generar ideas, una vez que existen, de pronto es como meter el freno de mano, detenerte y paralizarte por miedo o por no saber por dónde continuar. ¿Cómo sé si una idea es buena? ¿Cómo la evalúo? ¿Vale la pena invertir en ella? (Por invertir entiéndase, todo tipo de recursos: tiempo, dinero, gente, etc).
Antes que nada, ¡excelente! no todas las personas logran ser altamente creativos y generar muchas ideas, hay quienes son creativos por naturaleza y quienes lo logran con cierto entrenamiento, y cabe mencionar que TODOS, absolutamente TODOS, podemos lograrlo, es una característica que todos tenemos por el simple hecho de ser humanos.
No pierdas de vista la visión de tu empresa.
Para poder innovar y tener éxito dentro de una empresa, es necesario y prioritario que todo proyecto se alinee a la visión, si no sucede, corremos el riesgo de “perder el foco”, podrías comenzar por evaluar si esa idea realmente suma para alcanzar la visión. Toda empresa debe de tener objetivos a cumplir cada determinado tiempo y generalmente se diseña la estrategia para alcanzarlos. Primer punto para evaluar la idea es asegurar que se alinea con los objetivos estratégicos de la empresa.
¿Qué sigue si se alinea? Desarrolla el proyecto con los mínimos recursos posibles, hasta que puedas lograr obtener un prototipo que te permita hacer pruebas. Es importante detenernos en este punto y explicar un poco más ¿qué es un prototipo? Un prototipo se refiere a un objeto o modelo de un invento, algo nuevo que estás diseñando, pueden existir modelos para productos físicos, digitales, o de un servicio, etc. Y por lo mismo, un modelo no tiene que estar perfectamente terminado, un prototipo puede ser incluso ¡un dibujo! es “algo” que nos va ayudar a comunicar lo que estamos diseñando, y que nos sirve para obtener retroalimentación.
Hoy existen muchas herramientas de las cuales te puedes ayudar para prototipar, por ejemplo UXPIN es una plataforma poderosa para prototipar aplicaciones o desarrollos digitales. Si quieres desarrollar el prototipo para brindar un nuevo servicio, te puede servir esta hoja de trabajo para mapear “momentos de verdad” CLICK AQUÍ. O simplifícate y ¡haz simplemente un dibujo
¡Observa, pregunta, obtén información!
Siguiente paso, ¡obtén retroalimentación! pero no de cualquier persona, seguro tienes un buen amigo o colega a quien puedas exponer tu idea y que seguro te dará su opinión, pero por favor, no investigues con ellos, piensa en tu cliente ideal, a quien le estas resolviendo un problema o necesidad. Entrevista al posible usuario o si es posible permítele interactuar con tu prototipo y ¡observa! Puedes obtener información muy valiosa únicamente observando, ¿qué gestos hace la persona? Esto te dará más información que si solo preguntas.
Después de obtener retroalimentación siguen las mejoras, y el siguiente prototipo, y continúa el proceso hasta que consideres que te acercas al objetivo que tu esperabas. Al obtener retroalimentación, seguramente te llevarás sorpresas, buenas y malas. Pueden ser muy buenas que incluso superen lo que tu habías imaginado o tan malas que la gente no se interese en lo absoluto. ¡No te frustres! Aprende y vuelve a intentar. Recuerda que si no estas fallando es que no estas siendo creativo.
En este último punto es necesario resaltar la importancia de la intervención del usuario, es casi imposible innovar solo, necesitas de gente que sume a tus ideas, que desde otra perspectiva te pueda dar su opinión, por eso la importancia de los equipos multidisciplinarios y de la participación del usuario.
Y como último punto para platicar de cómo evaluar las ideas, es necesario que evalúes conscientemente si realmente estás resolviendo una necesidad o un problema a alguien, y lo deje al último por que si me gustaría que con algo te quedes de este post, es de este paso tan importante y que pareciera tan obvio.
Te impresionaría cuántas veces se generan productos, o servicios que alguien tuvo una idea, se enamoró del proyecto por que para el o ella era una gran idea, pero nunca realizó las pruebas con los usuarios reales. Aún sucede en grandes corporativos cuando centralizan este trabajo únicamente en el departamento de marketing, se basan en grandes estudios de mercado y lanzan nuevos productos, con un porcentaje de fracaso muy alto, ¿qué faltó? Analizar las necesidades del usuario, ojo que no menciono “preguntar”, por que si tu preguntas a la gente qué es lo que necesita, muchas veces ni siquiera lo sabe, y no hablo de forma despectiva.
Es necesario que “escuches” o “leas” entre lineas, te pongas en los zapatos del usuario y resuelvas.
En realidad no hay una receta mágica, ni un único camino, porque te toparas con eventos que ni siquiera podrías haber imaginado hasta que estas ejecutando, por eso considero que lo primero que tienes que tener es la actitud y estar listo mentalmente para el reto de innovar.
Innovar es ACCIÓN, innovar es retador, es una carrera de resistencia, muchos pueden generar ideas, y no valen nada hasta que alguien las lleva a cabo. Pero como toda carrera, también importa la técnica, los entrenamientos, las métricas y ¡un plan! y en innovación esto lo podemos traducir en metodología.
Te invito a que ¡TOMES ACCIÓN!
Ideas, ideas y más ideas de mis colaboradores, de mi gente… ¿cómo llego a este punto en mi organización? La siguiente semana te platicaré más a detalle acerca de cómo puedes lograrlo.
¡Nos leemos la siguiente semana!
Equipo BREINstorm
Innovation & Business Strategy
